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El año 2010 les sonrió a las edificaciones patrimoniales

FUENTE: La Nación. Aldea Global, p. 13 A
FECHA: Sábado 25 de diciembre de 2010
DIRECCIÓN: http://www.nacion.com/2010-12-25/AldeaGlobal/NotasSecundarias/AldeaGlobal2626452.aspx
AUTOR: Andrea Solano B. | This e-mail address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it

El 2010 volvió sus ojos al pasado y le sonrió generosamente para recordar a las nuevas generaciones la importancia de conservar el patrimonio arquitectónico.

Un total de 14 edificaciones que ostentan esa declaratoria fueron restauradas en el año que recién finaliza, lo cual significó una inversión de ¢740 millones provenientes del Centro de Patrimonio del Ministerio de Cultura.

Pero además, otros 12 inmuebles fueron intervenidos en diferentes grados gracias a proyectos financiados por fuentes externas, en su mayoría las personas o instituciones propietarias de los edificios.

Iglesias, escuelas, casas y hasta antiguos beneficios cafetaleros recuperaron su belleza arquitectónica y se mantienen en pie como testimonios permanentes de la historia de Costa Rica.

Según explicó la directora del Centro de Patrimonio, Sandra Quirós, entre el 2005 y el 2010 la institución ha realizado un monitoreo de 321 edificaciones declaradas y se determinó que el 50% requería un intervención de moderada a inmediata y ese fue el criterio que utilizó para echar a andar los proyectos de restauración.

Tesoros remozados. Varios templos católicos reciben a sus fieles ahora con un nuevo rostro. Tal es el caso de la iglesia San Luis de Tolosa, en Aserrí, a la que se le cambiaron el techo y la instalación eléctrica; la iglesia Pedernal, de Puriscal, a la cual se le hizo una restauración parcial, y la iglesia María Auxiliadora, en Cartago, edificación ganadora del certamen “Salvemos nuestro Patrimonio”, que fue premiada con ¢100 millones para restaurar su fachada, paredes, columnas y techos.

Mención aparte merecen las intervenciones en dos edificaciones coloniales, ambas ubicadas en la provincia de Cartago: la restauración total del templo católico de Orosi (¢40 millones) y el reforzamiento estructural de las Ruinas de Ujarrás (¢35 millones).

Asimismo, el pasado mes de noviembre los guadalupanos se alegraron de ver a uno de sus hitos arquitectónicos ser rescatado --literalmente-- de las cenizas: la casa Ricardo Jiménez Núñez. Tras una inversión de ¢50 millones (¢40 millones aportados por Patrimonio y otros ¢10 millones por el propietario) fue posible recuperar este centenario inmueble victoriano tras sufrir severos deterioros causados por el paso del tiempo, varias intervenciones inadecuadas, años de abandono y un incendio.

Durante el 2010 también fueron recuperadas dos estructuras que resguardan el legado económico, social y cultural asociado a la producción cafetalera en la Costa Rica de finales del siglo XIX: los beneficios. De este modo se restauró la casona de bahareque del beneficio Miramontes, en Heredia --la cual data de 1894--, y el beneficio Pejibaye, en Jiménez de Cartago.

  

Por otra parte, algunos otros proyectos ejecutados durante el 2010 fueron financiados por personas, instituciones u organizaciones, pero contaron con la asesoría e inspección del Centro de Patrimonio. Ejemplo de ello es el edificio La Alhambra (San José centro, entre avenidas central y segunda), cuya restauración fue posible gracias al financiamiento conjunto entre el Centro, la Junta de Andalucía de España y la Sociedad Inversiones Rodríguez Fairen S. A., propietaria del inmueble.

Uno de los proyectos más grandes y onerosos es la recuperación de los dos edificios que alojan el Colegio Superior de Señoritas, para el cual el Ministerio de Educación Pública destinará ¢1.600 millones. El plan maestro de restauración fue donado por la firma de arquitectos Ossenbach, Pendones & Bonilla.

Golpes bajos al patrimonio tico. Durante el 2010 hubo un par de “lunares” que ensuciaron su buena reputación como un año que dio importancia al rescate del patrimonio arquitectónico. Uno de ellos fue la destrucción de la casona de adobe de San Lorenzo, ubicada en Flores, Heredia. Los propietarios defendieron la demolición amparados en una solicitud de nulidad del proceso de declaratoria gestionado por la anterior ministra de Cultura, María Elena Carballo.

Otro caso que está pendiente es la restauración de la casa Jiménez de la Guardia, la cual se encuentra en un alarmante estado de deterioro y abandono, pero un conflicto legal entre sus propietarios ha impedido su rescate. El Centro de Patrimonio evalúa la posibilidad de una expropiación del inmueble.

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