Barrio chino de San José llegará justo para la época de Navidad |
• Proyecto se asentará en seis cuadras del paseo de los Estudiantes FUENTE: La Nación. Aldea Global, p. 12 A Faroles y arcos representativos de China iluminarán el paseo de los Estudiantes, en San José, a partir de la próxima Navidad. En esa zona, la Municipalidad capitalina tiene prevista la inauguración de un colorido barrio chino, evento que coincidirá con la época de fin de año. De cumplirse la promesa del ayuntamiento, seis cuadras de ese paseo, entre las avenidas 2 y 14, serán alusivas a la cultura de la nación asiática, y de paso servirán como palanca para atraer turistas. Para comodidad de los peatones, estará vedado el tránsito de vehículos por esa zona porque la carpeta asfáltica se sustituirá por un bulevar que funcionará como eje del proyecto. La excepción será para los autos que van hacia un parqueo, pues tendrán un carril para circular a baja velocidad. La construcción del paso peatonal comenzará en abril y se terminará en diciembre. Además, la obra incluye la sustitución de las tuberías y mejoras en los drenajes. Incluso, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) está anuente a que se cierre la calle 9 (paseo de los Estudiantes) aunque todavía no ha extendido el permiso por escrito, confirmó Ronny Rodríguez, de Ingeniería de Tránsito. Entre tanto, Johnny Araya, alcalde de San José, aseguró que esta obra se hará con la donación de $1 millón entregada por China, y con ¢200 millones aportados por el ayuntamiento josefino. “Uno de los arcos lo donará Pekín (capital de China) y se colocará 50 metros al sur de la avenida segunda. El otro (estará en la avenida 14) lo gestionamos con la colonia china en Costa Rica”, afirmó el alcalde. Los faroles también serán aportados por China, mientras que la decoración de los locales correrá por cuenta de los inquilinos, muchos de ellos de origen asiático que tienen en esa vía supermercados, tiendas y restaurantes, entre otros negocios. Visitantes. Como rédito local, Johnny Araya espera que el barrio chino dispare el número de visitantes extranjeros a la capital. “San José es una ciudad que debe proyectarse al turismo y desarrollar más atractivos. Queremos que los turistas que vienen al país visiten o se queden más días en San José, y no hay duda de que los barrios chinos son un atractivo para la ciudad”, opinó. La idea del barrio chino también ilusiona a comerciantes y personas que frecuentan el paseo de los Estudiantes. “Para el parqueo puede ser bueno porque vendrán visitantes, estacionarán sus autos aquí y podrán recorrer el barrio”, dijo Roberto Zeledón, quien trabaja en el estacionamiento Predius. Su criterio lo respaldó Elsa Camacho, mientras veía artículos en la tienda Da Xing, en la calle 9. “Estoy segura de que vendrá más gente con ese bulevar; en lo particular me gustan mucho los adornos que venden”, comentó. Por su parte, Isabel Yung, presidenta de la Asociación Colonia China, aseguró estar ilusionada con el proyecto aunque teme que la plusvalía de los locales alcance montos exorbitantes una vez finalizado el bulevar, lo que impediría instalar más negocios chinos. Cambios. Mientras preparan el barrio chino, quienes visiten San José enfrentarán incomodidades. Por ejemplo, el MOPT tendrá que reubicar las paradas de buses de Los Guido de Desamparados. “La calle 7 tiene el mismo sentido de circulación que la 9 (paseo de los Estudiantes), por eso, los vehículos que van de norte a sur podrán utilizar esa ruta. Además, ahí estarán las paradas porque la vía tiene capacidad”, enfatizó Ronny Rodríguez. Tras esos apuros, las luces, el colorido y el sabor asiático inundarán una porción de la capital. SABOR Y OLOR ASIÁTICO EN SAN JOSÉ Seis cuadras del Paseo de los Estudiantes se transformarán en un sitio para el intercambio cultural. ASIÁTICOS CAUTELOSOS: SILENCIO ENTRE COMERCIANTES CHINOS Obtener una declaración de alguna de las personas de origen asiático que tienen un negocio en el paseo de los Estudiantes, de la capital, es casi imposible. Un equipo de La Nación visitó el viernes pasado tiendas, supermercados y restaurantes chinos instalados en ese sector, no obstante, ninguno de sus dueños o administradores quiso hablar. Algunos dijeron que la barrera del idioma les impide hablar, aunque sí respondieron otras preguntas. Por ejemplo, la encargada de una tienda dijo no saber español. De inmediato, se le preguntó si había otra persona que no tuviera dificultades con el idioma y respondió que no. También se le pidió aval para hacer fotografías dentro del negocio y aceptó. * |